Investigadores suizos utilizan un dron automatizado para combatir los excrementos de paloma

Ahora presentamos un desafío tecnológico DIY para el fin de semana para los geeks urbanos cansados ​​de limpiar los excrementos de pájaros de sus autos. Se trata de replicar un proyecto de investigación suizo conectando sus cámaras a una computadora y programándola para que envíe automáticamente un dron para dispersar a las palomas que se han colocado en posición de no ser atacadas por bombas.

Eso es, más o menos, lo que hicieron los investigadores de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL) de Suiza cuando notaron que grandes grupos de palomas estaban causando que el techo del Centro de Convenciones SwissTech de la universidad tuviera que ser limpiado con frecuencia de densas capas de excrementos. Las tareas de limpieza recurrentes eran laboriosas y costosas (por no decir que provocaban asco), pero también eran necesarias para retirar incontables kilos de excremento que pueden propagar enfermedades y que, si se deja que se acumulen sin control, podrían socavar la estabilidad del techo. El daño causado por esos desechos aviares no es motivo de risa: algunos estudios muestran que el excremento de las palomas cuesta 1.100 millones de dólares cada año solo en los EE. UU.

Para evitar esa degradación –y con el fin de ahorrarles a los trabajadores de mantenimiento las interminables horas que tendrían que pasar eliminando basura–, los ingenieros de la EPFL y los expertos en informática comenzaron a pensar en formas automatizadas de prevenir el problema. Finalmente decidieron probar el uso de un dron para ahuyentar a las palomas. El aparato debía ser enviado por un ordenador mejorado con inteligencia artificial que utilizaría una cámara montada en el techo para proporcionar evidencia visual de que las criaturas que supuraban desechos empezaban a congregarse.

Como explican en su artículo con todo lujo de detalles, los investigadores de la EPFL utilizaron la cámara para enviar imágenes a un ordenador de una estación terrestre, que se había conectado a una red neuronal para analizar las imágenes que se recibían. Durante un período inicial de observación de tres semanas, el sistema se acostumbró a las idas y venidas de las palomas y, finalmente, pudo calcular cuántas aves se habían reunido en la estructura e incluso calculó sus coordenadas GPS.

El proyecto introdujo entonces un dron Parrot ANAFI que el sistema informático enviaba cada vez que la cámara detectaba una cantidad significativa de palomas en el tejado. Conociendo la ubicación exacta de las molestas aves, el cuadricóptero entraba en acción, ya fuera ahuyentándolas al acercarse o haciéndolas huir tras un vuelo prolongado.

¿El resultado? Después de cinco días de pruebas de esa segunda fase, los investigadores descubrieron que el dron (desplegado automáticamente por el sistema un total de 55 veces) no solo redujo drásticamente la cantidad de tiempo que las palomas permanecían en el techo, sino que incluso redujo la frecuencia con la que volvían a aterrizar allí.

“Hasta donde sabemos, este es el primer sistema basado en drones que ahuyenta a las palomas de forma totalmente autónoma”, afirma el artículo de investigación de la EPFL. “Nuestro método podría reducir los daños a los edificios y disminuir la transmisión de enfermedades transmitidas por las palomas. Además, los datos recopilados podrían utilizarse para comprender la compleja relación entre las palomas y los drones”.

El único pequeño inconveniente del experimento surgió de las normas de seguridad que exigen que un monitor humano autorice las órdenes del ordenador al dron para que despegue y haga volar a las palomas. Los autores esperan que en futuras pruebas se pueda evitar ese pequeño impedimento para la automatización completa.

FTC: Utilizamos enlaces de afiliados automáticos que generan ingresos. Más.

Venta con descuento de DJI FPV